Este fenómeno está relacionado con nuestras experiencias durante la infancia, entre otras más que llegaron a configurar quiénes somos hoy día. Sin embargo, debemos recordar todo lo que valemos y lo que merecemos, sin que ello signifique que debamos convertirnos en personas narcisistas ni egoístas.
Es una cuestión que demanda suficiente atención, ya que es algo que no se debe olvidar jamás, el amor propio. Necesitamos guiarnos, a través de nuestras habilidades e intuición, para identificar cuáles son nuestros límites, hasta dónde llegan nuestros derechos y dónde empieza el de los demás.
Debes ver el amor por ti mismo como una invaluable joya que requiere de cuidado para siempre brillar e irradiar hermosura e inspiración. Pues, lo mismo que harías con una joya lo harías con tu amor propio: no darlo al cuido a nadie más excepto tú, ni permitir que le hagan daño.
A continuación, queremos compartir contigo un par de consejos para que puedas recuperar el amor por ti mismo y brillar en tu máximo esplendor cada día, lo cual implica muchas veces perdonarnos a nosotros mismos, de errores del pasado, y poder continuar nuestro camino.
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